Un hombre de Dios al servicio de los hombres

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Oramos por la paz


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+ Por la señal de la santa cruz, de nuestros enemigos líbranos Señor Dios nuestro.

En el nombre del Padre, y de Hijo y del Espíritu Santo. Amén


Nos dice San Francisco de Asis en la Admonición 15:

Dichosos los pacíficos  porque serán llamados hijos de Dios. (Mateo 5,9.

Son verdaderamente pacíficos aquellos que en medio de todas las cosas que padecen en este mundo, conservan la paz en su alma y en su cuerpo por el amor de nuestro Señor Jesucristo.”


DIJO EL PAPA FRANCISCO... "¡Que una cadena de empeño por la paz una a todos los hombres y a las mujeres de buena voluntad! Es una invitación fuerte y urgente que dirijo a la entera Iglesia Católica, pero que extiendo a todos los cristianos de las demás Confesiones, a los hombres y mujeres de toda religión y también a aquellos hermanos y hermanas que no creen: la paz es un bien que supera toda barrera, porque es un bien de toda la humanidad".


ORACION POR LA PAZ DE JUAN PABLO II


"Creador de la naturaleza y del hombre

de la verdad y de la belleza, elevo una oración:

ESCUCHA MI VOZ

porque es la voz de las víctimas de todas las guerras

y de la violencia entre los individuos y entre las naciones;

ESCUCHA MI VOZ

porque es la voz de los niños que sufren y sufrirán

cada vez que los pueblos pongan su confianza en las armas

y en la guerra; 

ESCUCHA MI VOZ

cuando te pido que infundas en los corazones de todos

los seres humanos la sabiduría de la paz, la fuerza de

la justicia y la alegría de la amistad;

ESCUCHA MI VOZ

porque hablo en nombre de las multitudes de cada país

y de cada periodo de la historia que no quieren la guerra

y están dispuestos a recorrer el camino de la paz; 

ESCUCHA MI VOZ

y danos la capacidad y la fuerza para poder responder

al odio con amor, a la injusticia con una a dedicación a 

la justicia,

a la necesidad con nuestra propia involucración,

a la guerra con la paz.

Oh DIOS, ESCUCHA MI VOZ

y concede al mundo para siempre Tu paz". AMÈN


Ofrecemos el santo Rosario a la Santísima Virgen  y meditamos las palabras de Padre Pio acerca de la paz


Pésame


Primer Misterio: 

-Mantente siempre unida estrechamente a la santa Iglesia Católica, porque sólo ella te puede dar la paz verdadera, ya que sólo ella posee a Jesús sacramentado. Él es el verdadero príncipe de la paz (FM, 166). 

Padre Nuestro, 10 Ave María y Gloria


 Segundo Misterio: 

 -Calma, le recomiendo siempre calma. Las ansiedades angustiosas agotan y esterilizan la piedad cristiana (1260).

 Padre Nuestro, 10 Ave María y Gloria


 Tercer Misterio: 

 - …conservando la tran¬quilidad y la paz en cualquier circunstancia, haremos grandes progresos en las vías del Señor; por el contrario, perdida esta paz, todos nuestros esfuerzos conseguirán poco o ningún fruto para la vida eterna (608).

Padre Nuestro, 10 Ave María y Gloria

 

 Cuarto Misterio:.

- El enemigo de nuestra salvación co¬noce muy bien que la paz del corazón es un indicio seguro de la asistencia divina, y, por tanto, no deja pasar ocasión para hacérnosla perder. Por tanto, vivamos siempre alerta sobre este particular. Jesús nos ayudará (603).

Padre nuestro, 10 Ave María y Gloria


Quinto Misterio: 

La paz es la simplicidad del espíritu, la serenidad de la mente, la tranquilidad del alma, el vínculo del amor.

La paz es el orden y la armonía entre todos; es el continuo gozo que brota del testimonio de una buena conciencia; es la santa alegría de un corazón, en el que reina Dios.

La paz es el camino de la perfección, aún más, en la paz se encuentra la perfección.

El demonio conoce todo esto y hace todo lo posible para hacernos perder la paz 

Padrenuestro, 10 Ave María y Gloria

 

Por la intención del Santo Padre Francisco para este mes y  por la paz en el mundo, en especial en los países en guerra.

Padre nuestro, 3 ave María y Gloria


Oración a san Miguel Arcángel


SALVE  


El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna. Amén

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.


Rosario sobre "La vanagloria"


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 Grupos de Oración de San Pio de Pietrelcina

Santo Rosario – Febrero 2021

† Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos Señor Dios nuestro.

En el nombre del Padre y del hijo y del Espíritu Santo. Amén  


Nos enseña Padre Pio:

El alma es como un campo de batalla, donde Dios y Satanás no cesan de luchar. Es necesario abrir al Señor las puertas de nuestra alma de par en par y entregársela totalmente, fortificarla con toda clase de armamento, iluminarla con Su Luz para combatir las tinieblas del terror, revestirla de Jesús, con su verdad y justicia, con el escudo de la fe, con la Palabra de Dios. Solo así triunfaremos contra el enemigo. Para revestirse de Jesús es necesario despojarse de sí mismos."

Pésame

Primer Misterio: 

Graben bien en su mente; esculpan fuertemente en sus corazones; y convénzanse de que nadie es bueno «sino sólo Dios»; y que nosotros no te-nemos otra cosa que la nada. Vayan meditando continuamente lo que san Pablo escribe a los fieles de Corinto: «¿Qué tienes que no lo hayas recibi-do? Y, si lo recibiste, ¿por qué te glorías como si no lo hubieras recibido?». «No que seamos capaces - dice además - de pensar algo por nosotros mismos, como si fuera cosa nuestra; nuestra capacidad nos viene de Dios».

Cuando se sientan tentadas de vanagloria, repitan con san Bernardo: «Ni por ti lo inicié, ni por ti lo dejaré» ¿No comencé mi viaje por los caminos del Señor? Entonces, por ellos quiero seguir; por ellos continuaré mi mar-cha. Si el enemigo les asalta por la santidad de su vida, que le griten a la cara: mi santidad no es fruto de mi espíritu, sino que es fruto del espíritu de Dios que me santifica. Es un don de Dios; es un talento que me ha pres-tado mi Esposo para que yo negocie con él y después le rinda estrecha cuenta de la ganancia obtenida.

(2 de agosto de 1913, al P. Agustín de San Marcos in Lamis – Ep. I, p. 396)

Padre Nuestro, 10 Ave María y Gloria


Segundo Misterio: 

Las virtudes son como quien tiene un tesoro, que, si no lo tiene escondido a los ojos de los envidiosos, se lo robarán. El demonio está siempre vigi-lando; y él, el peor de todos los envidiosos, busca arrebatar este tesoro, que son las virtudes, tan pronto como lo descubre; y lo hace asaltándonos con ese enemigo tan poderoso que es la vanagloria.

Nuestro Señor, siempre atento a nuestro bien, para preservarnos de este gran enemigo, nos lo advierte en varios lugares del evangelio. ¿Acaso no nos dice que, si queremos hacer oración, nos retiremos a nuestro cuarto, cerremos la puerta y oremos de tú a tú con Dios, para que nuestra oración no sea conocida por los demás?; ¿que, al ayunar, nos lavemos la cara para que no descubramos nuestro ayuno a los demás en la suciedad y la palidez del rostro?; ¿que, al dar limosna, no sepa la mano derecha lo que hace la izquierda?

(2 de agosto de 1913, al P. Agustín de San Marcos in Lamis – Ep. I, p. 396)

Padre Nuestro, 10 Ave María y Gloria


 Tercer Misterio: 

 Tenía mucha razón San Jerónimo, al comparar la vanagloria con la sombra. De hecho, la sombra sigue al cuerpo a todas partes; y hasta le mide los pasos. Se aleja el cuerpo, se aleja también ella; camina a paso lento, también ella hace lo mismo; se sienta, y entonces también ella toma la misma posición.

Lo mismo hace la vanagloria; sigue por todos lados a la virtud. En vano intentaría el cuerpo huir de su sombra; ésta, siempre y en todas partes, le sigue y camina a su lado. Lo mismo le sucede a quien se ha dedicado a la virtud, a la perfección: cuanto más huye de la vanagloria, más es asaltado por ella. Temamos todos, querido padre, a este nuestro gran enemigo. Lo teman todavía más aquellas dos almas elegidas, porque este enemigo tiene un algo de inexpugnable.

Estén siempre alerta; no se deje a este enemigo tan poderoso entrar en la mente y en el corazón; porque, si consigue entrar, desflora las virtudes, corroe la santidad, corrompe todo lo que hay de belleza y de bondad.

Traten de pedir continuamente a Dios la gracia de verse preservadas de este vicio pestilente, porque «Todo don perfecto viene de arriba, del Padre de las luces». Abran sus corazones a la confianza en Dios. Recuerden siempre que todo lo que hay de bueno en ellas, es puro regalo de la suma bondad del Esposo celestial.

(2 de agosto de 1913, al P. Agustín de San Marcos in Lamis – Ep. I, p. 396)

Padre Nuestro, 10 Ave María y Gloria


Cuarto Misterio:

La vanagloria es un enemigo que acecha sobre todo a las almas que se han consagrado al Señor y que se han entregado a la vida espiritual; y, por eso, puede ser llamada, con toda razón, la tiña del alma que tiende a la perfección. Ha sido llamada con acierto por los santos carcoma de la santidad.

Nuestro Señor, para mostrarnos en qué gran medida la vanagloria es contraria a la perfección, lo hace con aquella reprensión que hizo a los apóstoles, cuando los vio llenos de autocomplacencia y de vanagloria, porque los demonios obedecían las órdenes que ellos les daban: «Sin embargo, no os alegréis porque los espíritus se os someten».

Y para erradicar del todo de sus mentes los tristes efectos de este maldito vicio, que suele conseguir insinuarse en los corazones, los atemoriza poniendo ante sus ojos el ejemplo de Lucifer, precipitado desde las alturas por la vana complacencia en la que cayó ante la grandeza a la que Dios le había ensalzado: «Veía a satanás, que caía del cielo como un relámpago».

Este vicio hay que temerlo todavía más porque no hay una virtud contraria para combatirlo. En efecto, cada vicio tiene su remedio y la virtud contraria; la ira se destierra con la mansedumbre; la envidia con la caridad; la soberbia con la humildad; etc. Sólo la vanagloria no tiene una virtud con-traria para ser combatida. Ella se insinúa en los actos más santos; y, hasta en la misma humildad, si no se está atento, ella coloca con soberbia su tienda.

(2 de agosto de 1913, al P. Agustín de San Marcos in Lamis – Ep. I, p. 396)

Padre nuestro, 10 Ave María y Gloria


Quinto Misterio: 

San Crisóstomo, hablando de la vanagloria, dice: «Cuantas más obras realices, buscando aplastar la vanagloria, tanto más la estimulas». ¿Y cuál es la causa de esto? Dejemos que nos lo diga el mismo santo doctor: «Por-que todo lo malo proviene del mal; solo la vanagloria procede del bien; y, por eso, no se extingue con el bien sino que se infla más».

El demonio, querido padre, sabe muy bien que un lujurioso, un ladrón, un avaro, un pecador, tienen más motivos para avergonzarse y para sonrojarse que para gloriarse; y, por eso, se cuida mucho de tentarlos por ese lado, y les ahorra esta batalla. Pero no se la ahorra a los buenos, sobre to-do al que se esfuerza por tender a la perfección. Todos los otros vicios se yerguen sólo en los que se dejan vencer y dominar por ellos; pero la vanagloria levanta la cabeza precisamente en aquellas personas que la comba-ten y la vencen. Se envalentona al asaltar a sus enemigos, sirviéndose de las mismas victorias que han conseguido contra ella. Es un enemigo que no se detiene nunca; es un enemigo que entra en batalla en todas nuestras obras y que, si no se está vigilante, nos hace sus víctimas.

En efecto, nosotros, para huir de las adulaciones de los demás, preferimos los ayunos ocultos y secretos a los visibles; el silencio, al hablar elocuente; ser despreciados, a ser tenidos en cuenta; los desprecios, a los honores. ¡Oh!, Dios mío. También en esto, la vanagloria quiere, como suele decirse, meter la nariz, acometiéndonos con vanas complacencias.

(2 de agosto de 1913, al P. Agustín de San Marcos in Lamis – Ep. I, p. 396)

Padrenuestro, 10 Ave María y Gloria

 

Por la intención del Papa Francisco para este mes de febrero:

Intención universal Recemos por las mujeres que son víctimas de la violencia, para que sean protegidas por la sociedad y para que su sufrimiento sea considerado y escuchado.

Padre nuestro, 3 ave María y Gloria


Oración a San José,  del Papa Francisco

Salve, custodio del Redentor  y esposo de la Virgen María.

A ti Dios confió a su Hijo, en ti María depositó su confianza,

contigo Cristo se forjó como hombre.

Oh, bienaventurado José, muéstrate padre también a nosotros

y guíanos en el camino de la vida.

Concédenos gracia, misericordia y valentía, y defiéndenos de todo mal. 

Amén.


San José nos ayude a imitarlo y a decir como San Pablo en Gálatas 6, 14:

“Yo sólo me gloriaré en la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por quien el mundo está crucificado para mí, como yo lo estoy para el mundo.”


Oración a san Miguel Arcángel


SALVE 


En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.


VIA CRUCIS II


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VIA CRUCIS II


I ESTACIÓN: Jesús es condenado a muerte


Te adoramos, Cristo y te bendecimos  
Porque por tu Santa Cruz redimiste al  mundo.

Del Evangelio según Juan (1, 9-12)
La Palabra era la luz verdadera que, al venir a este mundo,ilumina a todo hombre.Ella estaba en el mundo,y el mundo fue hecho por medio de ella, y el mundo no la conoció. Vino a los suyos, y los suyos no la recibieron. Pero a todos los que la recibieron, a los que creen en su Nombre, les dio el poder de llegar a ser hijos de Dios.


Jesús va repitiéndome: no tengas miedo/ no te asustes si yo permito al demonio  atormentarte, al mundo desagradarte, a las personas por ti más queridas afligirte porque nada podrá prevalecer contra los que gimen bajo la cruz  por mi amor y que yo me procuro de protegerlos [Padre Pio]


Padre Nuestro, Gloria al Padre

II  ESTACIÓN: Jesús con la Cruz a cuestas

Te adoramos, Cristo y te bendecimos
Porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo


Del Evangelio según Marcos (15.16-20)
Los soldados lo llevaron dentro del palacio, al pretorio, y convocaron a toda la guardia. lo vistieron con un manto púrpura, hicieron una corona de espinas y se la colocaron. Y comenzaron a saludarlo: «¡Salud, rey de los judíos!». Y le golpeaban la cabeza con una caña, le escupían y, doblando la rodilla, le rendían homenaje.
Después de haberse burlado de él, le quitaron el manto  púrpura y le pusieron de nuevo sus vestiduras. Luego lo hicieron salir para crucificarlo.


El verdadero remedio para no caer es apoyarse a la cruz de Jesús, con la confianza en que por nuestra salvación él quiso ser colgado [Padre Pio]

Ave María, Gloria al Padre


III ESTACIÓN: Jesùs cae por primera vez bajo la cruz

Te adoramos, Cristo y te bendecimos
Porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Del Evangelio según Lucas (9, 22-23)
El Hijo del hombre tendrá que sufrir mucho: es necesario. Los ancianos del pueblo, los principales sacerdotes y los maestros de la Ley lo rechazarán. Será asesinado, pero al tercer día resucitará. Si alguien quiere venir en pos de mí, deje de pensar en sí mismo, tome su cruz y sígame.


No te preocupes, Jesús está cerca de ti y te mira; está ahí para quitar tus dolores [Padre Pio]

Padre Nuestro, Gloria al Padre


IV ESTACIÓN: Jesús encuentra a su santísima Madre

Te adoramos Cristo y te bendecimos 
Porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo

Del Evangelio según Lucas (2, 34-35 51)
Simeón, después de bendecirlos, dijo a María, la madre: «Este niño será causa de caída y de elevación para muchos en Israel; será signo de contradicción, y a ti misma una espada te atravesará el corazón. Así se manifestarán claramente los pensamientos íntimos de muchos». El regresó con sus padres a Nazaret y vivía sujeto a ellos. Su madre conservaba estas cosas en su corazón.

La Virgen Madre que fue la primera a practicar el evangelio en toda su perfección, nos de el empuje   para seguirla [Padre Pio]

Ave María, Gloria al Padre

V ESTACIÓN: Jesùs es ayudado por Simón de Cirene a llevar la cruz

Te adoramos Cristo y te bendecimos 
Porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo

Del Evangelio según san Marcos (15, 21-22)
Y obligaron a uno que pasaba a  llevar la cruz, Simón de Cirene, que volvía del campo, padre de Alejandro y de Rufo a que llevara su cruz. Condujeron a Jesús al lugar del Gólgota  que significa “lugar del calvario”.


Bajo la cruz se aprende a amar y yo no la dono a todos, sólo a las almas que me son más queridas [Padre Pio]

Padre Nuestro, Gloria al Padre


VI ESTACIÓN: Verónica enjuga el rostro de Jesùs

Te adoramos Cristo y te bendecimos 
Porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo

Del libro de los Salmos (27, 8-9)
Mi corazón sabe que dijiste: «Busquen mi rostro».Yo busco tu rostro, Señor, no lo apartes de mí.
No alejes con ira a tu servidor, tú que eres mi ayuda;no me dejes ni me abandones,mi Dios y mi salvador.

Jesùs que sigue poseyendo vuestro corazón, os haga santos [Padre Pio]

Ave María, Gloria al Padre

VII ESTACIÓN: Jesùs cae por segunda vez


Te adoramos Cristo y te bendecimos 
Porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo

Del Libro del Profeta Isaías (53, 4-7)
Pero él soportaba nuestros sufrimientos y cargaba con nuestras dolencias, y nosotros lo considerábamos golpeado, herido por Dios y humillado. El fue traspasado por nuestras rebeldías y triturado por nuestras iniquidades. El castigo que nos da la paz recayó sobre él y por sus heridas fuimos sanados.
Todos andábamos errantes como ovejas, siguiendo cada uno su propio camino, y el Señor hizo recaer sobre él las iniquidades de todos nosotros. Al ser maltratado, se humillaba y ni siquiera abría su boca: como un cordero llevado al matadero, como una oveja muda ante el que la esquila, él no abría su boca.

Cuidamos no separar la cruz del amor de Jesús: se volvería una carga insoportable a nuestra fragilidad [Padre Pio]

Padre Nuestro, Gloria al Padre


VIII ESTACIÓN: Jesús se encuentra con las mujeres de Jerusalén

Te adoramos, Cristo,y te bendecimos 
Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo

Del Evangelio según san Lucas (23, 27-28)
Lo seguían muchos del pueblo y un buen número de mujeres, que se golpeaban el pecho y se lamentaban por él. Pero Jesús, volviéndose hacia ellas, les dijo: «¡Hijas de Jerusalén!, no lloren por mí; lloren más bien por ustedes y por sus hijos.

Practica dulzura interior y exterior en tu corazón [Padre Pio]

Ave María, Gloria al Padre

IX ESTACIÓN: Jesùs cae por tercera vez

Te adoramos, Cristo,y te bendecimos 
Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo

De la carta de San Pablo apóstol a los Filipenses ( 2, 6-7)
El, que era de condición divina, no consideró esta igualdad con Dios como algo que debía guardar celosamente,  al contrario, se anonadó a sí mismo, tomando la condición de servidor y haciéndose semejante a los hombres. Y presentándose con aspecto humano, se humilló hasta aceptar por obediencia la muerte
y muerte de cruz.

No te extravíes si la oscuridad de la noche  se torna más larga y sombría, mira hacia lo alto y verás brillar una lámpara que te mostrará  la luz del eterno sol [Padre Pio]

Padre Nuestro, Gloria al Padre

X ESTACIÓN: Jesús es despojado de sus vestiduras

Te adoramos, Cristo, y te bendecimos 
Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo

Del libro de los Salmos (22, 17-19)
Me rodea una jauría de perros, me asalta una banda de malhechores; taladran mis manos y mis pies
y me hunden en el polvo de la muerte. Yo puedo contar todos mis huesos; ellos me miran con aire de triunfo,
se reparten entre sí mi ropa y sortean mi túnica.

No tengas miedo de las condiciones de tu espíritu, el Señor está contigo y cuida de  tu alma [Padre Pio]

Ave María, Gloria al Padre



XI ESTACIÓN: Jesùs es crucificado

Te adoramos, Cristo, y te bendecimos 
Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo


Del Evangelio según san Marcos (15,22; 25-27)
Y condujeron a Jesús a un lugar llamado Gólgota, que significa: «lugar del Cráneo».
Ya mediaba la mañana cuando lo crucificaron. La inscripción que indicaba la causa de su condena decía: «El rey de los judíos». Con él crucificaron a dos ladrones, uno a su derecha y el otro a su izquierda.


La paz es la sencillez del espíritu, la serenidad de la mente, la tranquilidad del alma, el vínculo de amor: es la santa alegría de un corazón en que reina Dios [Padre Pio]

Padre Nuestro, Gloria al Padre

XII ESTACIÓN: Jesùs muere en la cruz

Te adoramos, Cristo, y te bendecimos 
Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo

Del Evangelio según san Marcos (15, 34; 37-39)
Y a esa hora, Jesús exclamó en alta voz: «Eloi, Eloi, lamá sabactani», que significa: «Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?».  Entonces Jesús, dando un grito, expiró.
El velo del Templo se rasgó en dos, de arriba abajo. Al verlo expirar así, el centurión que estaba frente a él, exclamó: «¡Verdaderamente, este hombre era Hijo de Dios!».


Pasará el invierno y la primavera llegará interminable, tanto más rica en belleza cuánto más duras hayan sido las tormentas [Padre Pio]

Ave María, Gloria al Padre

XIII ESTACIÓN: Jesùs es bajado de la cruz

Te adoramos, Cristo, y te bendecimos 
Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo

Del Evangelio según san Marcos (15, 42-43, 46)
Y ya al atardecer, como era la Preparación es decir, la víspera del sábado, vino José de Arimatea, miembro respetado del Consejo, que esperaba también el Reino de Dios, y tuvo la valentía de entrar donde Pilato y pedirle el cuerpo de Jesús. El comprando una sábana, lo descolgó de la cruz.


Distended vuestro corazón y permitid que el Señor opere libremente. Abrid vuestra alma ante el sol divino y dejad que sus beneficiosos rayos disipen las tinieblas que el enemigo os va presentando [Padre Pio]


Padre Nuestro, Gloria al Padre



XIV ESTACIÓN: Jesús es depositado en el sepulcro


Te adoramos, Cristo, y te bendecimos 
Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo

Del Evangelio según san Mateo ( 27, 59-60)
José tomó el cuerpo, lo envolvió en una sábana limpia y lo puso en su sepulcro nuevo que había hecho excavar en la roca; luego hizo rodar una gran piedra hasta la entrada del sepulcro y se fue.

Jesùs te ama: abandónate a sus sagradas operaciones y no tengas miedo porque Jesùs está contigo [Padre Pio]

Ave María, Gloria al Padre

CONCLUSIÓN

Te adoramos, Cristo, y te bendecimos 
Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo

Oremos:
Señor, que tu bendición descienda sobre estos hijos tuyos que han conmemorado la muerte de tu Hijo con la esperanza de resucitar con él; vengan el perdón y el consuelo, aumente la fe, se fortalezca la certeza en la redención eterna. Por Cristo nuestro Señor.  Amén